miércoles, 5 de octubre de 2011

Cómo prevenir el abuso sexual infantil


Si bien es cierto que la mayoría de las veces el abuso infantil ocurre dentro del seno familiar, los padres y adultos que están cerca de los niños, pueden prevenirlo o al menos, tomar la mayor cantidad de medidas para minimizar las posibilidades de que suceda, hablando con ellos acerca de su sexualidad, dejando tabúes de lado y siguiendo las siguientes conductas. Cómo prevenir el abuso sexual infantil

1. Enseñar e inculcar el respeto por el cuerpo. Mi cuerpo es mío y nadie lo puede tocar si yo no quiero.
 
2. Enseñar cuáles son las partes íntimas y privadas del cuerpo que nadie, aunque sea un familiar directo, puede tocar sin consentimiento
 
3. Enseñar a identificar los distintos tipos de caricias.
 
4. Hablarle al niño acerca de que no debe aceptar caricias que no le gustan o lo hacen sentir incómodo, por más que sea un adulto el que las propina.
 
5. Hablarles que el respeto a los adultos no implica incondicionalidad hacia ellos, es decir, tener que permitir que los acaricien o toquen y mucho menos que los hagan prometer que no van a contar nada.
 
6. Impulsarlos a contar cualquier cosa que les suceda relacionada con su cuerpo. A no guardar secretos de ese tipo por miedo o vergüenza.

El abuso sexual deja una marca, una huella difícil de borrar en la psique del niño. No obstante ello, con tratamiento psicológico, apoyo, ayuda profesional, es posible que salga adelante, se recupere emocionalmente y pueda continuar con su vida sin grandes traumas.
 La intervención temprana y seria es la mejor manera de ayudarlo y salvarlo de una situación de este tipo.



¿Qué debemos enseñarles a los chicos?

1. Debemos enseñar a los chicos que su cuerpo les pertenece y que nadie puede tocarlos sin su permiso. 

2. Enseñarles que hay partes íntimas o privadas del cuerpo. 

3. Respetar y saber que los niños tienen derecho a no querer que les den un beso o les toquen, incluso cuando se trata de una persona ala que quieren.

4. Los chicos no siempre pueden diferenciar bien las formas apropiadas e inapropiadas de tocar. Los mimos buenos y mimos malos, son distintos. Los mimos buenos son los buenos abrazos, besos y caricias, son muy lindos y siempre te hacen sentir bien, te hacen feliz, te ponen contento. Los mimos malos son los malos abrazos, malos besos y malas caricias, son muy feos, te hacen sentir muy mal, no te hacen feliz y te ponen muy triste. 

5. Enseñar a los chicos a decir “No”, de manera inmediata y firme, a un contacto físico inapropiado, explicar que pueden decir “No” en cualquier momento. Debemos asegurarnos que sepan que pueden pedir ayuda a un adulto de confianza.

6. Enseñarles que hay secretos buenos y secretos malos. Los secretos buenos son, por ejemplo, un regalo que compramos para alguien o una fiesta sorpresa. Los secretos malos son los que los ponen tristes o los ponen nerviosos o los hacen sentir mal o incómodos. Los secretos malos no deben mantenerse.

7. Enseñarles que si no están seguros si el comportamiento de alguna persona es bueno, que pidan ayuda. Enseñarles a alejarse de situaciones que no les gusten. Enseñarles que no está bien que alguien mire o toque las partes íntimas o privadas de su cuerpo. O que les pidan que miren o toquen las partes íntimas de otra persona. 

8. Enseñarles que si alguien les hace mimos malos, nunca, jamás es culpa de ellos. Debemos estar atentos al comportamiento de los chicos, cuando hacen algo que llama la atención o tienen cambios de humor; si están tristes, o callados, si están más ansiosos o peleadores o excitados, sin perder tiempo, debemos conversar con ellos sobre aquello que les puede estar pasando, sin asustarlos. No siempre algo diferente en el comportamiento de los niños implica un caso de abuso o maltrato, pero es conveniente que siempre preguntemos y escuchemos para ayudarlos.


Los chicos nunca tienen la culpa ni provocan las situaciones de abuso. No mienten cuando cuentan que fueron abusados o maltratados. Debemos creerles aunque esto lleve a enfrentar a alguien de la familia. Es imprescindible escuchar a los chicos, creerles, y denunciar. El silencio o la negación hacen que el abuso siga ocurriendo. Si es que hay un error, no se perdió nada, de lo contrario, ¿a quién estamos preservando?
Los chicos pueden percibir que alguna situación no está bien, pero puede que no sepan cómo explicarla ni a quién decírselo. Somos los adultos quienes debemos estar atentos y ser receptivos.



3 comentarios:

  1. me parecen excelentes estas recomendaciones y como docente, madre y abuela, las tengo muy en cuenta a la hora de ayudr a formar a mis nietos, hijos y alumnos.. gracias!!.. reenvio a mis contactos esta información...

    ResponderEliminar
  2. Que informacion tan importante la que nos ha proporcionado el señor Vazquez, en los niños no es valido el consentimiento por el solo hecho de tratarse de una personita de corta edad, el que infringe la ley natural es la persona adulta que manosea o hace caricias a un niño/ña, que recien se esta formando como persona, es deber de sus madre enseñarle las partes intimas de sus cuerpitos diciendoles que no permitan a nadie que no sea su propia madre, tocar, acariciar o tan solo posar sus manos sobre el menor, de ser asi, hay que decirles que comenten inmediatamente a su mama, no interesando si se trata de su padre, tio, primo,o cualquier persona que fuere integrante de su nucleo familiar, porque los abusos sexuales generalmente ocurren en el plano familiar, y/o en cualquier lugar que puedan concurrir los niños. La prevencion es lo mas adecuado dado que disminuye la posiblidad de que existan niños/ñas, con problemas psicologicos futuros.

    ResponderEliminar
  3. SOY PSICOOLOGA CLINICA, PERO DONDE ME PUEDO ESPECIALIZAR EN ESTE TEMA?

    ResponderEliminar

Muchas gracias por tus comentarios